Es todo un desafío elegir el tipo de dieta que funciona para mí, y de hecho lo es. Si le preguntas a tus amigos y familiares, verás que algunos de ellos han decidido hacer dieta en un momento u otro, por diferentes razones. En general, es difícil seguir una dieta estricta por largo tiempo, pero todo depende de las necesidades de cada individuo.
El tema de la alimentación siempre ha estado dentro de mis prioridades, debido al proceso de recuperación que he llevado en especial con uno de mis kiddos, por aquello de las alergias. Ahora quien necesita cambiar algunos hábitos soy yo, así que me he introducido un poco más a investigar el tema de la dieta cetogénica.
Quizás hayas oído hablar de esta dieta ó plan de alimentación; pero la verdad es que ha existido por algunos años. De hecho hay diversas investigaciones que la respaldan. Hoy en día, la dieta cetogénica es principalmente conocida por su efecto de pérdida de peso y el bajo consumo en carbohidratos. Originalmente fue diseñada para ayudar a los pacientes con convulsiones y epilepsia [1].
Parece que al imitar los efectos del ayuno, y limitar los carbohidratos, esta dieta ayudó a reducir lel número de convulsiones. Los beneficios de esta dieta también se observaron en pacientes que padecen diabetes tipo 2, así como en aquellos que buscan apoyar la salud cardiovascular y cerebral. Esta dieta también puede ayudar a apoyar el tratamiento de varios tipos de cáncer [2] y disminuir los síntomas del autismo.
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Estos beneficios provienen principalmente, debido a que la dieta cetogénica estimula al cuerpo a utilizar la energía de la grasa en lugar de la glucosa. Lo hace reduciendo drásticamente la ingesta de carbohidratos y reemplazándola con grasa. Y ahora vamos a sumergirnos en lo bueno y lo menos tan bueno de esta dieta.
Hay algunos aspectos que realmente aprecio al respecto. Al igual que algunas de las otras dietas populares, como paleo, vegan, etc; la dieta cetogénica promueve el consumo de alimentos naturales y frescos en lugar de los procesados. En cualquier ajuste de estilo de vida saludable, éste es probablemente una de los mejores beneficios que puede aportar al organismo. Cuando comes fresco, tienes el control total de los ingredientes que estás poniendo en tu cuerpo. ¡Y esa es una gran victoria!
Además, al limitar los carbohidratos, también se evitarán los alimentos altos en azúcar y almidón, que por lo general son bajos en nutrientes como la pasta, queso etc. Aunque esta dieta promueve el aumento de grasa, hace hincapié en la diferencia que hay entre: las grasas saludables y las no saludables. La atención se centra en las grasas saludables como el aceite de coco, aguacate, chía, semillas de lino y nueces. No solo promueve las saludables, sino hace énfasis en el consumo de verduras de hoja verde y en vegetales sin almidón. Espinacas, col rizada, repollo, brócoli, coles de Bruselas y alcachofas. Todos ellos son extremadamente ricos en nutrientes.
Por otro lado, como cualquier dieta limitante, uno debe ser consciente de si esta es la opción correcta para tu cuerpo. Como sabemos, todos tenemos diferentes necesidades y no debemos hacer cambios drásticos en la dieta sin consultar a un profesional.
Dado que esta dieta puede restringir mucho el consumo de carbohidratos, a menudo se pueden eliminar frutas del menú. Aunque las frutas son altas en carbohidratos debido a su azúcar natural, también son ricas en fibra y excelentes nutrientes. Si las frutas se eliminan de la dieta, éstas deben ser reemplazados con otros alimentos que otorguen los nutrientes complementarios que el cuerpo requiere.
Algunos otros alimentos que podrían eliminarse del menú, son los frijoles, las legumbres, así como los granos y las verduras con almidón. Estas son todas excelentes fuentes de fibra y nutrientes. Entonces, una vez más, si se eliminan, tienen que ser sustituidos por una alternativa saludable que también reemplace los nutrientes provistos en estos alimentos.
Y, finalmente, para responder la pregunta: “¿Es la dieta cetogénica para mí?” Hay investigaciones y pruebas que respaldan los beneficios de esta dieta [7]. Pero recuerda: No todo funciona para todos. Sí decides Cambiar la Dieta para Mejorar tu organismo, es necesario hacer una evaluación previa de cómo está tu salud; cómo te sientes, simplemente escucha tu cuerpo. Sientes dolores de cabeza, cansancio, falta de energía etc..? pues éstos síntomas son alertas, quizás es el momento hacer cambios y tomar acción para mejorar la salud.
Saludos,
Amparo 🙂
Fuentes:
[1] Autism spectrum disorder and epilepsy: the role of ketogenic diet
[2] Ketogenic diets for cancer, autism, dementia, and migraine?
- Epilepsy.com’s Keto News includes summaries of cutting edge research and helpful hints for people with epilepsy, parents, and caregivers who receive or provide diets for the treatment of epilepsy.
- One book available is, “The Ketogenic Diet: A Treatment for Children and Others with Epilepsy,” by Dr. Kossoff and his team, which discusses the Johns Hopkins approach and experience.
- The Charlie Foundation and Matthew’s Friends are parent-run organizations for support.
- Watch Dr. Eric Kossoff in “The Promise and Challenge of Dietary Therapy for Epilepsy” at the George Washington University Epilepsy Grand Rounds on March 8, 2016.
[3] Beyond weight loss: a review of the therapeutic uses of very-low-carbohydrate (ketogenic) diets.
[4] The Ketogenic Diet Center
[5] Very-low-carbohydrate ketogenic diet v. low-fat diet for long-term weight loss: a meta-analysis of randomised controlled trials.
[6] dietdoctor.com
[7] Ketogenic Diet Resources
Vitamina D, Fundamental para la Salud