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La dieta puede desempeñar un papel muy importante para mejorar los síntomas del autismo. El consumo de una dieta antiinflamatoria de alimentos enteros y sin procesar es fundamental. Estos alimentos incluyen carnes orgánicas alimentadas con pasto, pescado silvestre, frutas y verduras orgánicas y grasas saludables. Es importante eliminar los alimentos procesados y cultivados convencionalmente.
Existen dietas especiales que pueden ser muy beneficiosas para determinadas personas. Por ejemplo, se ha demostrado que eliminar el gluten y la caseína de la dieta mejora los síntomas en niños con autismo ( 1 ).
Las dietas más populares para el autismo son GFCFSF (Libre de glúten, casína y soya) y la dieta GAPS. Otra que pueden ser útiles son: SCD Dieta de Carhohídratos Simples, la dieta baja en oxalatos, la dieta baja en salicilatos, y la dieta cetogénica (Keto).
Las histaminas y los glutamatos también pueden ser problemáticos para ciertas personas.
Se podría probar una de estas opciones durante 2 a 4 semanas y ver si se notan mejoras. Pero si se tienen dudas sobre cómo implementar un protocolo de alimentación, es una buena idea la asesoría con un profesional de nutrición con experiencia en autismo.
1. Dieta Libre de Glúten, Caseína & Soya
Este protocolo, es uno de los tratamientos dietéticos más utilizados para el autismo. Se basa en la teoría del “exceso de opioides”; según la cual el autismo es el resultado de un trastorno metabólico en el que un “intestino permeable”, es incapaz de descomponer proteínas como el gluten y la caseína, permite la absorción sistémica de fragmentos peptídicos (gliadinomorfinas y casomorfinas) que luego actúan como opioides endógenos en el sistema nervioso central .
La dieta sin gluten y sin caseína [GFCF] es una dieta de eliminación. Es decir, consiste en remover ciertas proteínas de la dieta normal, como el gluten y la caseína.
El Gluten es una proteína encontrada en el trigo, la cebada y el centeno y los alimentos derivados de ellos. Por ejemplo, pan, pasta, galletas y cereales de desayuno. La caseína es una proteína que se encuentra en la leche de vaca, cabra y oveja y en alimentos derivados de ellos, por ejemplo, la crema, el yogur y el queso. (01, 02)
2. Dieta Gaps
La dieta del síndrome del intestino y la psicología (GAPS) fue desarrollada por la Dra. Natasha Campbell-McBride después de trabajar con niños y adultos con autismo y otras afecciones neurológicas y psiquiátricas.
GAPS reconoce la conexión entre las funciones del sistema digestivo y el cerebro.
La dieta GAPS se derivó de la dieta de carbohidratos específicos (SCD), pero se ajustó para abordar las necesidades de las personas que padecen afecciones intestinales y neurológicas como resultado de un microbioma comprometido.
La dieta GAPS elimina los alimentos que son difíciles de digerir y que dañan la flora intestinal y los reemplaza con alimentos ricos en nutrientes que son fáciles de digerir. Los alimentos eliminados incluyen carbohidratos complejos, lactosa, sacarosa y alimentos procesados de la dieta. La dieta GAPS ayuda a mejorar las condiciones inflamatorias crónicas en el tracto digestivo.
El libro “GAPS, El síndrome psico-intestinal” de la doctora Dra. Natasha Campbell-McBride, recopila toda la información necesaria para implementar éste protocolo.
3. Dieta de Carbohidratos Específicos (SCD)
La Dieta de Carbohidratos Específicos es útil para las personas que sufren trastornos gastrointestinales, enfermedad celiaquía (esta dieta es completamente libre de gluten, además hay muchos celíacos que aparte del gluten no toleran lactosa, almidones etc.), colitis ulcerativa, fibrosis quística del páncreas, diarrea crónica, enfermedad de Crohn, síndrome de intestino irritable, candidiasis crónica.
Es un protocolo alimenticio que ha sido adaptada por profesionales de la salud para tratar trastornos mentales y de desarrollo, ya que muchos de ellos están acompañados por problemas intestinales, autismo y otros trastornos dentro del espectro autista, hiperactividad y déficit de atención, depresiones, esquizofrenia etc.
Está libre de gluten, soya, la mayoría de los carbohidratos, colorantes y aditivos artificiales. Limitar la ingestión de carbohidratos ayuda con a detener el crecimiento excesivo de levadura y bacterias patógenas en el intestino.
El libro publicado sobre esta dieta esta originalmente en inglés: Breaking the Vicious Cycle: Intestinal Health Through Diet. En español se denomina Romper el Círculo Vicioso.
4. Dieta Baja en Oxalatos
Una dieta baja en oxalatos (ácido oxálico) restringe los alimentos con alto contenido de oxalatos.
El ácido oxálico es un compuesto orgánico que se encuentra en muchos alimentos como: la espinaca, la remolacha, el chocolate, el maní, el salvado de trigo, el té, las bayas y las nueces (anacardos, nueces y almendras).
Estos alimentos son muy saludables para la mayoría de las personas, pero su consumo excesivo puede causar altos niveles de ácido oxálico en el cuerpo.
Además de obtener oxalatos de los alimentos, tu cuerpo puede producir ácido oxálico. Es el ácido orgánico más ácido del cuerpo, derivado principalmente de hongos (Aspergillus y Penicillium), Candida o del metabolismo de una persona.
Las deficiencias de vitamina B6 que son comunes en el autismo también pueden contribuir a las elevaciones de ácido oxálico.
Los altos niveles de oxalatos pueden causar daño oxidativo, inflamación y dolor. Los cristales de oxalato se pueden formar en las articulaciones, los vasos sanguíneos, los músculos, los riñones, los pulmones, el corazón, la tiroides, los ojos e incluso el cerebro.
El ácido oxálico alto puede dificultar el funcionamiento adecuado de las funciones corporales vitales, envenenar las mitocondrias, dañar los tejidos y contribuir a la formación de cálculos renales.
5. Dieta Baja en Salicilatos
Muchos niños con autismo son sensibles a los salicilatos. Es probable que esto se deba a una sulfatación deficiente, un proceso bioquímico que, según los investigadores, es bajo en niños con autismo ( 2 ).
Los salicilatos son un grupo de productos químicos derivados del ácido salicílico. Estos compuestos se encuentran de forma natural en ciertos alimentos y de forma sintética en otras sustancias. Los salicilatos pueden causar reacciones adversas en personas intolerantes.
Los síntomas de intolerancia o sensibilidad a los salicilatos incluyen congestión nasal, infección e inflamación de los senos nasales, pólipos nasales y sinusales, asma, diarrea, gases, dolor abdominal, inflamación intestinal, urticaria e inflamación de los tejidos.
Una dieta baja en salicilatos es fundamental para las personas que sufren de intolerancia o sensibilidad a los salicilatos.
Los salicilatos también se pueden encontrar en productos no alimentarios, como pasta de dientes con sabor a menta, champús y acondicionadores, perfumes, enjuagues bucales, lociones y medicamentos. La fuente más potente es la aspirina y otros medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), incluido el ibuprofeno.
6. Dieta Cetogénica
La dieta cetogénica es un plan de nutrición alto en grasas, bajo en carbohidratos y moderado en proteínas. Este plan de nutrición y estilo de vida ayuda a su cuerpo a usar la grasa almacenada y grasa dietética en lugar de azúcar, como combustible.
Con una dieta cetogénica, del 60 al 80 % de las calorías provienen de grasas saludables , del 20 al 30 % provienen de fuentes de proteínas y del 5 al 10 % provienen de carbohidratos netos (carbohidratos totales menos fibra). Los beneficios para la salud de una dieta cetogénica incluyen reducir la inflamación, mejorar la función cognitiva, equilibrar los niveles de azúcar en la sangre y más.
Se ha demostrado que la dieta cetogénica reduce los síntomas del autismo. Un estudio comparó la dieta cetogénica con una dieta sin gluten, sin caseína (GFCF), y la dieta cetogénica produjo mejores resultados ( 1 ). Sin embargo, la dieta cetogénica fue más difícil de seguir para los niños.
7. Dieta de Eliminación
Hay ciertos alimentos que tienen más probabilidades de causar una respuesta inmune en el cuerpo. Una dieta de eliminación ayuda a identificar problemas. Los alimentos eliminados son aquellos que son más comúnmente alergénicos ó inflamatorios, incluidos el gluten, lácteos, azúcar, huevos, maíz, soja, aceites vegetales, cereales, mariscos, frutos secos, y legumbres.
La dieta de eliminación , consiste en eliminar ciertos alimentos durante 4-6 semanas para ver si hay alguna mejora en los síntomas. Una vez que la persona ha eliminado los alimentos dañinos, puede comenzar a sanar y restaurar su sistema digestivo especialmente; agregando alimentos, nutrientes y suplementos específicos.
El objetivo es aumentar los niveles de nutrientes, mejorar la bioquímica y la función celular, sanar el intestino y restaurar el microbioma.
El siguiente paso es reintroducir lentamente los alimentos que fueron eliminados. Al reintroducir alimentos, es importante registrar todos los alimentos consumidos con cualquier síntoma positivo ó negativo. Se debe modificar el plan de nutrición en función de los resultados de la reintroducción, y ampliar la dieta para incluir variedad de alimentos y densidad de nutrientes como lo tolere el cuerpo.
Alimentos Saludables Para Los Chicos TEA
Hay ciertos alimentos con beneficios particulares para la salud del cerebro. Estos incluyen:
1. Carne de Res Alimentada con Pasto y Salmón Silvestre
La ingesta adecuada de proteínas es crucial para los niños con autismo. Estos chicos pueden tener niveles reducidos de aminoácidos como triptófano, fenilalanina y taurina, lo que puede indicar una mayor necesidad de proteínas ( 2 ).
La carne de res alimentada con pasto está cargada de ácidos grasos omega-3, ácido linoleico conjugado (CLA), grasas saturadas, vitamina B12 y carnosina. Estos nutrientes son clave para desarrollar un cerebro saludable y optimizar la función cerebral ( 3 ). Evite la carne de res alimentada con granos y criada convencionalmente que tiene menos nutrientes y mucho más ácidos grasos omega-6 inflamatorios y químicos ambientales tóxicos.
El salmón capturado en la naturaleza está lleno de ácidos grasos omega-3 de cadena larga EPA y DHA, que son cruciales para la salud del cerebro ( 4 ). El salmón salvaje también tiene astaxantina, que se ha demostrado que disminuye el estrés oxidativo y la inflamación en el cuerpo ( 5 ). Los niños con autismo pueden tener niveles más altos de estrés oxidativo ( 2 ).
2. Frutas Cítricas
Los limones son naturalmente ricos en vitamina C, bioflavonoides cítricos y electrolitos clave como el potasio y el magnesio.
Los bioflavonoides cítricos son fitonutrientes únicos que se clasifican como vitamina P. En realidad, no es una vitamina, sino el conjunto de bioflavonoides, con propiedades antioxidantes y anti-inflamatorias todas ellas componen el complejo P que tienen propiedades antivaricosos, antiflebíticos y antihemorrágicos.
Los bioflavonoides cítricos mejoran la permeabilidad capilar y el flujo sanguíneo. Es decir, ayuda a oxigenar las regiones profundas del cerebro.
Las regiones profundas del cerebro son fundamentales para el procesamiento cognitivo y la agudeza sensorial. Los aceites esenciales de cítricos también son excelentes fuentes de bioflavonoides cítricos.
3. Chocolate Negro y Cacao Crudo
El chocolate negro es excelente para la salud del cerebro. Tiene efectos positivos sobre la inflamación, el estrés, el estado de ánimo, la memoria y la inmunidad ( 6 ). Es un superalimento que contiene muchos nutrientes:
- Fibra
- Magnesio
- Hierro
- Cobre
- Calcio
- Proteínas
- Manganeso
El chocolate negro contiene ácido oleico y está cargado con una mezcla de polifenoles, especialmente flavonoides, que tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Este super-alimento puede aumentar los niveles de neurotransmisores en el cerebro como la dopamina y la serotonina.
Cuanto mayor sea la concentración de cacao, mayor será el impacto positivo en la salud del cerebro. El cacao oscuro (70% o más) es menos procesado y tiene mayores cantidades de antioxidantes. Para obtener los mejores resultados, busque cacao crudo que puede encontrar en polvo y en nibs. Si tiene problemas con el metabolismo del oxalato, es mejor evitar ó usar cantidades mínimas de chocolate.
4. Hierbas
Las hierbas y especias como la canela, el romero y la cúrcuma son excelentes para la salud del cerebro.
La canela es rica en antioxidantes y tiene una puntuación ORAC muy alta, que es su capacidad de absorción de radicales de oxígeno. Esto significa que la canela ayuda a proteger las neuronas del estrés de los radicales libres. La canela estimula los receptores de insulina en el cuerpo y juega un papel importante en la estabilización de los niveles de azúcar en la sangre ( 7 ).
Otra especia increíble para la salud del cerebro es la cúrcuma. La cúrcuma contiene curcumina, un poderoso compuesto para la salud del cerebro. También contiene Ar-turmerona, un compuesto soluble en grasa que puede ayudar a la regeneración cerebral en enfermedades neurológicas ( 8 ). Se demostró que la ar-turmerona aumenta las células madre del cerebro y forma nuevas células cerebrales sanas.
El romero es un estimulante cerebral que ayuda a prevenir la descomposición del neurotransmisor clave, la acetilcolina ( 9 ). La acetilcolina es fundamental para el funcionamiento diario del cerebro, particularmente en las áreas de movimiento, aprendizaje, memoria y calidad del sueño.
Suplementos Para la Salud del Cerebro
El autismo es una enfermedad complicada caracterizada por una inflamación cerebral crónica. Hay muchos suplementos naturales que ayudan a mejorar la respuesta inflamatoria y apoyan la salud del cerebro. Si bien estos no están aprobados por la FDA para prevenir, mitigar, tratar o curar el autismo, pueden ser muy beneficiosos.
1. Ácidos Grasos Omega 3
Los ácidos grasos esenciales ayudan a mantener la salud de la membrana celular. Se ha demostrado que los ácidos grasos omega 3 reducen la inflamación y mejoran la salud del cerebro.
El aceite de hígado de bacalao es una de las mejores fuentes de ácidos grasos omega 3 EPA y DHA. El aceite de hígado de bacalao también tiene vitamina D y es una gran fuente de vitamina A para la salud del cerebro, la piel y los ojos. A menudo se puede encontrar en forma líquida que puede funcionar si el niño autista tiene problemas para tragar pastillas. También puede considerar ponerlo en batidos o mezclarlo con alimentos.
El omega 3 se puede conseguir en cápsulas
Omega 3 líquido
Omega 3 en gomitas
2. Suplemento multivitamínico/mineral
Las deficiencias de nutrientes son comunes en el autismo. Un gran estudio exhaustivo encontró que los niños con autismo tenían niveles más bajos de varias vitaminas (especialmente biotina) y algunos minerales (litio, calcio y magnesio) ( 2 ). Se ha demostrado que la suplementación es muy útil para reponer las deficiencias y mejorar los síntomas del autismo.
A menudo puede encontrar multivitaminas masticables que están formuladas para abordar las necesidades nutricionales únicas de los niños para el crecimiento, el desarrollo y la vitalidad. Asegúrese de buscar una fórmula completa de multivitaminas y minerales con nutrientes en su forma más absorbible que esté libre de aditivos, conservantes y alérgenos.
Muchas personas con autismo tienen mutaciones MTHFR, lo que significa que tampoco procesan las vitaminas B y otros nutrientes. Me gusta buscar formas preactivadas de vitaminas B como metil-folato, metil-cobalamina (B12), forma de piridoxal-5-fosfato de B6 y forma de riboflavina-5-fosfato de vitamina B2.
Los grupos metilo en forma activa serán mejor utilizados por el cuerpo y tendrán un mejor impacto en el proceso de metilación. La metilación es fundamental para la desintoxicación, ya que ayuda a activar la expresión génica saludable, la función inmunológica y el apoyo a la salud del cerebro.
3. Próbioticos & Enzimas Digestivas
Mejorar la salud intestinal y equilibrar el microbioma es fundamental para cualquier persona con autismo. El intestino se considera el segundo cerebro debido a la cantidad de terminaciones nerviosas y neurotransmisores que están relacionados con la función intestinal.
Cuando el revestimiento intestinal está inflamado y dañado, las proteínas grandes ingresan al torrente sanguíneo. Esto crea inflamación en todos los tejidos, incluido el cerebro.
Los probióticos son microorganismos beneficiosos (bacterias y levaduras) que mantienen sanos el intestino y el cuerpo. Son similares a los microorganismos que viven naturalmente en nuestros cuerpos. Hay cuatro tipos de probióticos que puede usar:
- Probióticos a base de alimentos, como especies de lactobacillus y bifidobacterium.
- Levadura probiótica, como saccharomyces boulardii
- Probióticos a base de suelo (SBO), como las cepas formadoras de esporas de bacillus
- Probióticos combinados, que tienen cepas lacto, bifido, S boulardii y bacillus.
No todos tratan de la misma manera. Para elegir el más conveniente se puede experimentar para ver qué funciona mejor. Para los niños y las personas con poca capacidad para tragar, es una buena idea obtener suplementos masticables si es posible.
Las enzimas digestivas mejoran la función digestiva, mejoran la absorción de nutrientes y ayudan a aliviar las molestias gástricas. Puede encontrar buenas enzimas digestivas que incluyen una variedad de enzimas clave para abordar todos los efectos enzimáticos digestivos. Estas enzimas pueden sobrevivir en los diferentes rangos de pH del estómago y el intestino delgado.
4. Magnesio
El magnesio es denominado el “mineral maestro” y apoya más de 300 procesos fisiológicos o funciones en el cuerpo. Ayuda a aliviar el estrés y promueve el sueño al equilibrar los niveles de azúcar en la sangre y aliviar la tensión física.
También ayuda a regular los niveles de melatonina y GABA en el cerebro. Esto ayuda a reducir la actividad de hiperactividad en el cerebro. También ayuda a los niños y adultos a poder concentrarse, mejorar el estado de ánimo y dormir de manera más efectiva.
5. Glutatión
Un gran estudio mostró que el glutatión es más bajo en niños con autismo ( 2 ). El glutatión es el principal antioxidante del cuerpo que ayuda a proteger el cerebro de los radicales libres dañinos.
Hay suplementos para ayudar a aumentar el glutatión, como N-acetil-L-cisteína (NAC) y acetil-L-carnitina (ALC). NAC es un aminoácido que es esencial para que el cuerpo produzca glutatión. ALC es un tipo de carnitina producida naturalmente en el cerebro. ALC es un poderoso antioxidante que puede atravesar la barrera hematoencefálica y estimular y fortalecer las células nerviosas del cerebro. También puede ayudar a dirigir los ácidos grasos a las mitocondrias, el centro neurálgico de las células. Esto ayuda a crear nueva energía celular.
La fosfatidilserina (PS) es una clase de fosfolípidos que se encuentran en las membranas celulares. Es fundamental porque ayuda al cerebro a utilizar el combustible de manera más eficiente. Aumenta el metabolismo neuronal y estimula la producción de acetilcolina.
Pruebas Para Detectar Problemas intestinales y Cerebrales
1. Prueba Completa de Acidos Orgánicos
Mi mejor prueba para cualquier persona con autismo es la Prueba Integral de Ácidos Orgánicos ( OAT ). La OAT muestra una instantánea metabólica extensa de la salud general de una persona.
El OAT mide los niveles de neurotransmisores, el crecimiento excesivo de levaduras, hongos y bacterias, los oxalatos, las mitocondrias, la oxidación de cetonas y ácidos grasos, los niveles de vitaminas y minerales, el ciclo de Kreb (producción de energía), el estrés oxidativo y las vías de desintoxicación. Esta prueba es una prueba de orina casera, por lo que puede ser fácil de hacer para los niños.
2. Análisis de heces de ADN GI-MAP™
Dado que el microbioma intestinal desempeña un papel tan importante en el autismo, un análisis exhaustivo de las heces es una prueba importante. La prueba de análisis de heces GI-MAP es la prueba de heces más completa del mercado.
Es un análisis integral de heces que identifica los niveles de bacterias normales (buenas) y bacterias disbióticas (malas) en el intestino. Es una forma fantástica de medir los desequilibrios de las bacterias.
Además de bacterias, el GI-MAP puede detectar Candida y otros hongos y parásitos, incluidos protozoos y gusanos. Esta prueba integral de heces puede revelar si tiene H. pylori, patógenos virales, posibles desencadenantes autoinmunes y virus, incluidos el citomegalovirus y el virus de Epstein Barr.
El GI Map mide la salud intestinal con marcadores de digestión, gastrointestinales, secretores y antigliadina IgA (respuesta inmunitaria) y calprotectina (inflamación).
Conclusión
El autismo es una condición compleja con síntomas variables. Esta condición por lo general se presenta en la primera infancia, pero puede durar toda la vida de una persona.
Si bien se desconoce la causa exacta, hay una serie de factores que pueden contribuir al autismo.
Existen estrategias naturales para ayudar a las personas a controlar los síntomas del autismo. Mejorar la salud intestinal y equilibrar el microbioma son estrategias clave. Hay una serie de dietas especiales que pueden tener un impacto profundo en mejorar la calidad de vida de los chicos TEA. La suplementación dirigida también puede ser muy beneficiosa. Hay una variedad de pruebas que pueden ser útiles, incluida la prueba de ácidos orgánicos y el mapa GI.
Referencias:
- Ketogenic diet versus gluten free casein free diet in autistic children: a case-control study
- Nutritional and metabolic status of children with autism vs. neurotypical children, and the association with autism severity
- Maternal omega-3 fatty acid supplementation on vitamin B12 rich diet improves brain omega-3 fatty acids, neurotrophins and cognition in the Wistar rat offspring
- Long-chain omega-3 fatty acids improve brain function and structure in older adults
- Astaxanthin decreased oxidative stress and inflammation and enhanced immune response in humans
- Dark chocolate consumption reduces stress and inflammation
- Plasma. 1,8-cineole correlates with cognitive performance following exposure to rosemary essential oil aroma
- Cinnamon: Potential Role in the Prevention of Insulin Resistance, Metabolic Syndrome, and Type 2 Diabetes
- Aromatic-turmerone induces neural stem cell proliferation in vitro and in vivo